11 de junio de 2007

Un ave


Pues si..., otra vez estoy escribiendo por aca. Esta vez no pienso hacer un escrito tan largo como los anteriores, al contrario, solo escribo para ver algo distinto en este blog.


Aprovecho la ocasión para presentarles a un personaje extraño que me ha estado visitando todas las mañanas. Un buen día llegó y empezó a chillar, se posó en el árbol que está frente a mi ventana, desde ahi se quedaba mirando fijamente hacia mi cuarto mientras yo usaba la computadora, o leía el periódico, o tocaba la guitarra..., me sentí como en aquél poema de Allan Poe, solo que éste no es un cuervo, es un ave que disfruta de su libertad y que gusta de observar cómo es la vida en cautiverio. A mi me gusta pensar cómo es la vida en libertad, creo que es algo que tenemos en común, tal vez uno desea conocer cómo es la vida del otro.


Todos los días se abalanza varias veces hacia mi ventana, y justo cuando pasa por enfrente, chilla. Creo que a veces me invita a salir, a no quedarme encerrado en mi casa y disfrutar del Sol por la mañana, me recuerda que allá afuera hay muchas cosas que quieren ser vistas, que están esperando a alguien para que las disfrute.


El viernes pasado disfruté enormemente una de esas cosas: la lluvia. Si hay algo que me gusta en esta vida es disfrutar de una buena lluvia. Caminar mientras llueve es una de esas cosas que me llenan, ver los relámpagos rasgar el cielo y escuchar los truenos cimbrando la tierra junto con el ruido constante del agua que cae, me ayuda a pensar en cosas que se quedan atoradas en mi cabeza y que a veces no logro hacer que fluyan, aunque hay veces que me hace pensar demás...


Esa tarde caminé un rato por CU, los paisajes que ahi se forman son tremendos, me encantan. No a mucha gente le gusta la lluvia, así que mientras caminaba por las islas, no pude ver a alguien alrededor, todo mundo se resguardaba en los pasillos o edificios mientras yo caminaba con paraguas en mano. La soledad se ha convertido en un lugar que me es muy familiar, sí, a veces pesa, tanto que incluso cuando estoy con alguien hay veces que me siento solo, no porque la persona con la que esté sea una mala compañía, al contrario, yo no creo que exista tal cosa como las malas compañías, a decir verdad, hay veces que me sucede con personas que valoro y aprecio mucho. Cuando eso pasa no pongo mucha atención, no hablo mucho (bueno, siempre me he considerado un mejor escuchador que platicador, pero bueno), mi mente se dedica a pensar en otras cosas que me afectan o molestan y que necesito digerir para que no influyan tanto en mi, por lo general miro hacia otro lado y lo único que sale de mi boca es la primer tontería que me llega a la cabeza, así que, si notas que alguno de estos síntomas se presenta en mí cuando estoy contigo, por favor, haz lo mismo que este personaje que me viene a visitar por las mañanas, no dejes que me pierda de lo que pasa fuera de mi, en verdad lo agradeceré.

1 comentario:

Pingüino dijo...

Es lindo saborear las simplezas de la vida, y también es padre estar en contacto con la naturaleza, y que mejor que con tu nuevo "amigo", bueno, al menos te visita. Por cierto, caminar bajo la lluvia es "chidisimo", pero siempre será mejor, cuando caminas sin el paraguas jejejejeje, acuerdate cuando jugábamos fut en la napoles o por centro médico, y los partidos duraban mucho tiempo, no importaba si llovía, seguíamos jugando. :D

Sale pues brother, cuidate mucho, te mando un fuerte abrazo. Gracias por tu comentario.